- 1 vaso colmado de almendras enteras tostadas y con la piel
- 1 vaso de azúcar
- 1 vaso de agua
- 1 cucharada de vainilla en polvo o esencia de vainilla
- Lo ponemos todo a fuego fuerte a la vez y cuando empieza a hervir bajamos a fuego medio y removemos a menudo con una cuchara de madera.
- Cuando el agua se vaya consumiendo (entre 20 y 30 min) tenemos que remover sin parar porque pueden quemarse las almendras.
- El azúcar se queda en el fondo de la cazuela con un color blanco. Subimos el fuego un poquito para que al hacerse caramelo se vaya pegando a las almendras. Si lo subimos demasiado se pegarán unas con otras, tiene que estar a fuego medio-alto.
- Vamos sacando las que ya están listas y las ponemos en una fuente, las separamos y las dejamos enfriar.
- Una vez frías podemos guardarlas por mucho tiempo en un bote cerrado.
En verano es mejor conservarlas en la nevera.
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